jueves, 19 de junio de 2014

Un paseo por Borgoña y visita a Born to Quilt II


Como os comentaba hace un par de entradas, nuestra rápida visita a la región de Borgoña estaba motivada, principalmente, por la posibilidad de visitar "Born to Quilt", la tienda de Véronique Requena.
 
 
 
La mayoría de "quilteras" y bordadoras sabrán de quién hablo. Véronique Requena es una dama francesa, decoradora de profesión, apasionada del patchwork y que desde hace unos años representa el estilo campestre de este tipo de labores en Francia, primeramente, y posteriormente en el resto de Europa.
 
Tengo que reconocer que lo ha sabido hacer bien. Creo que ha conseguido encontrar su lugar en este mundillo y ahora se ha convertido en una especie de "gurú" del patchwork. Esta claro que gusto tiene, y mucho. Es trabajadora y muy simpática.
 
En una de mis visitas a Francia hace algunos años, compré un ejemplar de la revista "Magic Patch" enteramente dedicada a ella. Yo no sabía quién era pero me gustó su estilo.
 
 
 
Tiempo más tarde, visitando diferentes blogs descubrí que se había publicado un libro con las labores que aparecían en aquella revista, y que todavía conservo... luego llegó otro libro, cursos, "quilt camps"... y ahora tiene su propia colección de telas fabricadas y distribuidas por Gütermann.
 
Al alojarme en la misma aldea en la que ella vive y donde tiene su moniiiiiiiiiisima tienda, tuve la oportunidad de disfrutar de media mañana con ella a solas... lo cierto es que es muy cercana y cariñosa, la selección de artículos de su tienda es preciosa... hablamos de lo divino y lo humano, me ofreció un café y conocí a Lizzy, su perra y emblema de todos sus trabajos.
 
 
 
Defensora de los animales a ultranza, su Lizzy es como su bebé, y no se separa de ella "casi" para nada.

 


Me encantó comprobar cómo ha convertido su pasión en su trabajo, cómo había montado una tienda de patch "divina de la muerte" en el jardín trasero de su casa, donde cada detalle está cuidado hasta el extremo.
 
Pero está claro que es un trabajo, y que ha elegido aprovechar el momento, y sacarle el máximo partido... y eso se ve claramente al llegar allí.
 
 
Es evidente que no elegí el atuendo más "chic" para hacer la visita ni la mejor pose para la foto. Fue la propia Véronique quien tomó mi cámara para hacer las fotos y, bueno, por lo menos puedo testificar que estuve allí, jaja.
 
En cualquier caso, la felicito, porque ha cumplido su sueño y esta viviendo su momento.
 
 
  
Por cierto, este pequeño quilt fue un regalo que hizo Madame Requena a los propietarios de "La Tour de Giry".

1 comentario:

El Palacio de Martín dijo...

Que lugar tan bonito! !!
Gracias por compartir estos momentos tan especiales con nosotr@s.
Un besazo guapa! !!